Enjuague bucal
Cómo usar correctamente el enjuague bucal.
Para garantizar una correcta salud bucodental es fundamental cepillar los dientes varias veces al día, utilizar el hilo dental, cuidar la alimentación y mantener unos buenos hábitos. ¿Crees que eso es suficiente?
Hoy queremos hablar del enjuague bucal, ya que en algunos pacientes es necesario incorporarlo a su rutina como complemento a la limpieza mecánica, pero a saber que… nunca debemos hacerlo como sustituto. Es complemento ideal por ejemplo en pacientes con poca habilidad motriz y con ortodoncia o con prótesis donde es más difícil el acceso para una correcta limpieza.
¿Qué es el enjuague bucal?
El enjuague bucal es un producto líquido que ayuda a eliminar restos de bacterias. Contiene un principio activo como el flúor o algún agente antiséptico lo que ayuda a evitar el desarrollo de infecciones.
Hay distintos tipos de enjuagues, dependiendo siempre de las necesidades del paciente. Los que llevan flúor para prevenir la caries, los que tratan la halitosis o la hipersensibilidad dental…
En ningún caso se debe ingerir el producto.
El dentista será el que nos prescriba el más adecuado. Sin olvidar siempre que lo más importante a la hora de una buena higiene bucodental es el cepillado.
Diferencia entre enjuague y colutorio.
No, no es lo mismo. ¿Conoces la diferencia que hay entre el colutorio y el enjuague bucal?
El enjuague bucal, como indicamos en el punto anterior sirve para completar la limpieza dental. Por otro lado, el colutorio se utilizaría para tratar infecciones bucales, son algo más densos y por ejemplo los que llevan antiséptico serían el complemento en el tratamiento de la periodontitis o gingivitis.
Cómo usar el enjuague bucal.
Tanto el enjuague bucal como el colutorio, es recomendable utilizarlo después del cepillado. Todos llevan un dispensador incluido en el envase, a veces el mismo tapón, que permite medir la cantidad a enjuagar que suele oscilar entre los 10 ml a los 15ml.
No es necesario en la mayoría de los casos diluir el producto, y si fuera preciso se hace con agua. Después del enjuague durante un minuto, más o menos, se escupe y nunca se enjuaga con agua ya que esto le restaría efectividad.
El enjuague bucal nunca reemplazará al cepillado dental, que será mínimo dos veces al día, ni al uso de cepillos interdentales o hilo dental.
