En el sector odontológico siguen apareciendo novedades y cada vez está más digitalizado. Los nuevos instrumentos y técnicas nos permiten grandes avances que mejoran nuestro trabajo a la vez que nuestros pacientes consiguen mejores resultados.
Es uno de los grandes avances en odontología, la impresión 3D. Este término habitualmente define al conjunto de procesos donde se construyen objetos a través de añadir materiales en capas, para crear un objeto completo. Esta tecnología se utiliza para formar modelos y prototipos. La impresión 3D es un método que convierte un modelo virtual en un objeto físico.
En odontología esta tecnología de los escáneres permite con gran precisión que se puedan diseñar piezas de gran calidad y alta resolución. Entre las grandes ventajas frente a la fabricación manual está la reducción de los plazos de entrega y la perfección de las piezas que se ajustan como un guante, con un margen de error muy bajo.
La impresión 3D, permite replicar de forma exacta la anatomía de las estructuras que se encuentran dentro de la cavidad oral. La base de la anatomía dentaria también se puede imprimir en 3D y se puede ajustar de acuerdo con la morfología dental de cada paciente.
Para crear las piezas, esta máquina utiliza resina líquida sensible a la luz ultravioleta. Este material requiere un gran cuidado en su manipulación, y hay que ser muy meticuloso en la rutina de trabajo. La formación cuenta un papel muy importante ya que también se debe dominar el software CAD CAM para cerrar el círculo de esta tecnología que nos brinda la oportunidad de mejorar en calidad, mayor precisión y menor tiempo en nuestras intervenciones.
La precisión, seguridad y velocidad con que se hacen los diagnósticos hoy día, no se puede comparar con los realizados poco tiempo atrás. Por poner ejemplos, las antiguas radiografías que en ocasiones se repetían porque generaban dudas al odontólogo, también las prótesis dentales se realizaban partiendo de unas medidas que se tomaban con silicona. Estos moldes se rellenaban de escayola y se trabajaban con un articulador. Este proceso manual ahora ya no se realiza prácticamente.
Brackets, alineadores, dentaduras, coronas, fabricación de modelos de estudio y de trabajo… Gracias a esta tecnología somos capaces de realizar escaneos orales y diseño CAD CAM en un tiempo record y una precisión casi exacta.
En primer lugar no debemos dejar de nombrar al fundador de la impresión 3D, que es Charles Hull de la Universidad de Colorado en EE. UU. Allá por los años ochenta con el enfoque en la impresión 3D comienza a utilizar luz ultravioleta (UV) para endurecer el recubrimiento de la superficie de algunos dispositivos.
Simplificando y sin entrar en detalles técnicos, de manera muy resumida podemos contar cómo iniciamos el proceso que nos lleva al diseño en la impresora. Partimos con un modelo de trabajo obtenido con el escáner intraoral, a partir de ahí con el software de modelado asistido por el ordenador obtenemos el diseño que necesitamos y lo pasamos a la impresora que lee los datos y va aplicando capas sucesivas, en nuestro caso de resina líquida fabricando el modelo que le hemos asignado.
Entrar en la era digital nos permite mejorar todos los aspectos de los tratamientos odontológicos que podamos llevar a cabo en nuestra clínica.
Como profesionales debemos conocer, adaptarnos y aplicar estas tendencias de la forma más eficiente posible.
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